martes, 28 de julio de 2009

Engaños

—Nada, aquí estoy como una tonta mirando el móvil, pero este tío no contesta.
—Hagamos una cosa: ve a la agenda, cambia mi nombre por el suyo y te contesto que sí, que te voy a follar hasta las meninges. Es una farsa, pero es bonita.

2 comentarios:

Ra dijo...

Mucho mejor que el chocolate :)

La tonta del móvil dijo...

Lo peor es que en su momento me pareció una buena idea xD